Entrevista con “Superman” López

Miguel Ángel ya probó lo que es subirse a un podio, ¿quieres saber cómo lo hizo?

Arrancamos esta nota con todo, no sabíamos si era un sprint, un premio de montaña o una contrarreloj, pero al final Superman nos invitó a subir al podio con él. 

Desde pequeño tenía que andar en bicicleta, para ir al pueblo, para ir a la escuela, para escaparme un poco de todo.

Practiqué muchos deportes, pero que me iba a imaginar que el ciclismo sería mi profesión. 

A mi papá le interesaba que yo aprendiera los oficios de la finca, que le ayudara con los animales y en la casa, él no quería que yo “perdiera el tiempo” con la bicicleta y le insistí por muchos años que me dejara competir, porque yo en el fondo sentía que tenía las capacidades para ganarles a todos, pero él no pensaba igual. 

Hasta que un día me le volé, me cansé de que me dijera que yo por allá iba a hacer el oso y que lo iba a dejar en ridículo y le llegué con una medalla. 

Un señor del pueblo que fue corredor profesional y que es el que tiene el ojo para descubrir el talento fue el primero que me dio la confianza para seguir, me prestó una de sus bicicletas y así arranqué. 

Luego junté a toda la familia e hicimos una vaca para comprar otra mejor y claro con la presión de tener que demostrarles a todos ellos que no se habían equivocado apoyándome con la bicicleta comencé a ganar más y más carreras. 

Tuve por fin una bicicleta decente para competir, seguí ganando carreras y me comencé a hacer un nombre en el ciclismo, tuve la suerte de que el mejor equipo del mundo me fichara y me llevara a competir a Europa. 

La vida en España no es fácil, estar lejos de la familia, de los amigos, de la comida que uno quiere es muy complicado, pero es un esfuerzo que vale la pena, porque cuando me subo a la bicicleta y termino una carrera siento que de verdad estoy haciendo eso para lo que nací.