Indudablemente, ha estado nervioso y ha tenido manos y palmas sudorosas en un momento u otro. A veces lo espera y lo enfrenta. ¿Qué pasa si sucede con demasiada frecuencia o el sudor es más que una humedad leve? Aprender a detener las manos sudorosas puede ayudarlo a recuperar su confianza. Le sorprenderá saber que, en casos severos, las palmas sudorosas son en realidad una afección médica. Es una forma de sudoración excesiva llamada hiperhidrosis palmar, según Cedars-Sinai.
Muchas personas se preguntan por qué sudan las manos, y la respuesta suele estar relacionada con el sistema nervioso simpático y sus reacciones al estrés.
En tiempos de estrés, si el peligro es real (lo persigue un león) o percibido (como hablar en público, sin daño físico), el sistema nervioso simpático, que usted puede conocer como el sistema de lucha o huida, responde preparándolo para la acción, dice Harvard Health Publications. Su frecuencia cardíaca aumenta mientras que su sistema circulatorio se dilata para proporcionar más sangre para sus músculos que pronto estarán en funcionamiento. Su respiración se acelera en preparación para esfuerzos titánicos y oleadas de adrenalina que le dan esa sensación eléctrica en sus piernas. Empieza a sudar para mantener su cuerpo fresco y funcionando de manera eficiente. Con suerte, ya está comenzando a ver la conexión entre esta respuesta de lucha o huida y las manos sudorosas. La hiperhidrosis es una sensibilidad y una sobrecompensación de las glándulas sudoríparas a su sistema nervioso simpático. Por eso, si alguna vez se ha preguntado por qué sudan las manos sin una razón aparente, la respuesta puede estar en una reacción nerviosa desproporcionada. Incluso cuando no se siente físicamente amenazado, esa energía nerviosa durante una reunión importante, una primera cita o una presentación pública puede desencadenar la misma reacción que huir de las garras de un depredador hambriento.
Si esto parece ser un problema para usted, hay algunas opciones de tratamiento. El curso que elija depende de la severidad o de sus síntomas. Todo el mundo tiene las palmas sudorosas de vez en cuando, pero si sucede con frecuencia o lo suficiente como para que literalmente gotee de sus palmas, querrá ver a un médico para conocer las opciones serias y a largo plazo. Se pueden recetar medicamentos que desensibilizan las glándulas sudoríparas.
Si busca tratamiento a largo plazo, depende de usted y de su médico. Mientras tanto, puede consolarse con el hecho de que no está solo. Millones de personas viven con sudores excesivos y existen grupos de apoyo e investigaciones en curso para ayudarlo a aprender cómo detener las manos sudorosas. Si bien solo es una solución temporal, puede mantener un pañuelo o pañuelos desechables con usted para secarse las manos inmediatamente antes de una reunión importante o antes de tomar la mano de su cita. También puede ir al baño para lavarse las manos rápidamente.
Las palmas sudorosas no solo afectan las situaciones sociales. Si está haciendo algún tipo de actividad física o trabajo que requiere tener las manos secas, considere usar talco para absorber algo de humedad. Dado que la sudoración está relacionada con el estrés y el sistema nervioso, ¡cualquier cosa que pueda hacer para aumentar la confianza y reducir el estrés no le hará daño!
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